De nuevo al comparar Scrum y Kanban podemos apreciar pequeñas diferencias que convertirán a uno más adecuado para tu proyecto. Decide cuál.
Como te expliqué en el post anterior (Diferencias entre Scrum y Kanban) los aspectos que separan a estas dos metodologías son mínimos. Pequeños matices dentro de las ideas de gestión ágiles. Tu proyecto y tus preferencias a la hora de trabajar deberán inclinar la balanza a favor de una ellas.
Comparar Scrum y Kanban por sus tableros
Anteriormente te comenté que Kanban presta especial atención al panel Kanban como medio para organizar el flujo de trabajo. En él las tareas circulan por las distintas etapas con un límite determinado. De esta manera, constantemente hay tareas operativas en todas las fases de la producción. A medida que unas salen, entran otras, pero siempre se trata de un flujo estable.

Por el contrario en un tablero de Scrum las tareas se mueven en bloque. Al comienzo del Sprint entran de golpe todas las tareas que se han aprobado para ese Sprint Backlog. Por lo tanto, se acumulan en la primera fase del proceso productivo. Durante el Sprint se desarrollan todas ellas. Al concluir el Sprint se acumulan en la última fase. Y, finalmente, se vacía el tablero de Scrum.
Como puedes ver, el flujo de trabajo en Kanban hace que el reparto de tareas en las distintas fases de la producción sea equitativo. Según el límite del trabajo en curso las tareas se reparten a lo largo de todas las etapas. Mientras que en Scrum las tareas entran todas al mismo tiempo, se ejecutan y salen todas a la vez.
Los equipos multifuncionales
Una de las premisas propias de Scrum es que sus equipos de trabajo sean multidisciplinares. En ellos se agrupan todos los conocimientos necesarios para completar los requerimientos solicitados en la iteración.
Kanban trabaja de un modo distinto. Los equipos no tienen porqué ser multifuncionales. En cambio, es importante contar con trabajadores T en el equipo Kanban. Te lo explico.
Mientras que en una iteración de Scrum todo el equipo debe ser capaz de completar los elementos solicitados en el Sprint. En Kanban los equipos se estructuran según las fases del panel. Cada equipo desarrolla la parte que le corresponde. Solamente se produce un solapamiento de funciones entre equipos cuando hay un atasco. En estos casos, se cuenta con ese miembro T que ayuda al equipo en cuya fase se ha originado el atasco.
La estimación de velocidad

Al comparar Scrum y Kanban puedes ver un concepto que resulta imprescindible en la primera de las metodologías. La estimación de velocidad es necesaria para valorar la cantidad de trabajo aceptable en un ciclo.
Debido a la limitación temporal que se establece para los Sprints en Scrum, de una a cuatro semanas, la estimación de velocidad es necesaria. El equipo debe ser capaz de predecir qué número de elementos y qué requerimientos es capaz de desarrollar en el periodo establecido para ese ciclo. De esta marea podrá establecer los límites a las solicitudes por parte del dueño del producto para evitar que se sobrepase la duración máxima de una iteración.
Esto no quiere decir que en Kanban no se haga una estimación de la velocidad que tardan en producir. Es importante conocer cuánto tardan en completar la elaboración de un producto de cara a ofrecer plazos de entrega realistas a los clientes. Pero se trata de una opción, no de algo prescrito por la metodología.
Las reuniones de trabajo
Las reuniones en Scrum son otro de los elementos claramente definidos en su metodología. Al comienzo de cada ciclo tienen una reunión de planificación del Sprint. Diariamente realizan una pequeña reunión en la que el equipo de desarrollo pone en común la evolución del proyecto. Al finalizar la producción siempre hay una reunión para revisar el sprint y evaluar el objetivo alcanzado. Incluso se establece otra más en la que se analiza el desarrollo de la iteración en busca de mejoras que puedan aplicar en los próximos Sprints.

Si tratas de comparar Scrum y Kanban verás que en el segundo caso no se establece ninguna reunión. Sin embargo, que no forme parte de la teoría no quiere decir que no se haga. Es común en Kanban que se realicen las reuniones que consideren necesarias. Muchas dirigidas a la solución de los atascos. Muy frecuentemente se están incorporando las reuniones diarias. Cinco minutos al comienzo de la jornada para que todo el equipo se ponga al día.
Como ves, Scrum concreta qué reuniones se deben celebrar, cuándo y cómo. Por su parte, Kanban no dice nada al respecto. Sin embargo, es una buena práctica que sin ninguna duda asumen.
Conclusión
Tras comparar Scrum y Kanban has podido ver que las similitudes son mucho más importantes que las diferencias. A pesar de que yo me he centrado más en los aspectos en los que no coinciden, éstos son de menor relevancia. Incluso aunque Scrum es más restrictivo y condiciona ciertos aspectos, los usuarios de Kanban adoptan algunas de estas obligaciones voluntariamente.
Ahora te toca a ti decidir. ¿Cuál de las dos metodologías se ajusta mejor a tus necesidades?O quizá, ¿qué tal si las mezclas, y sacas lo mejor de cada una? Scrumban.
“Un vaso medio vacío de vino es también uno medio lleno, pero una mentira a medias, de ningún modo es una media verdad”.
Jean Cocteau